15 de mayo de 2009

Confieso que he pecado II


Hoy viajé en un transporte público (hacía rato que no lo hacía). Asiento individual, cara de culo, normal. Sólo algo me hacía ruido, un infante, de esos que hablan a los alaridos, sentado, con su inescrupulosa madre en diagonal a mi persona. Entre gritos y pedidos, el niño me mira, lo miro, lo cago a pedos con la mirada y le “saco la lengua”. El pequeño se puso a llorar.

Puta madre, ahora lo voy a tener que escuchar llorar.

5 comentarios:

el_iluso_careta dijo...

só de la inquisición vó!!!!

Anónimo dijo...

Uh,que bajon jaja...yo tambien les saco la lengua pero se rien,porque nadie me toma en serio eh?Enseñame a que lloren!

oveja y negra dijo...

Hoy viajé en colectivo y el chofer no me dió el vuelto, no conforme con eso, aceleró y me tiro de orto antes de poder sentarme.besos.

el Rafa dijo...

Sos muy peleadora desconocida…

Fernanda. dijo...

Iluso: Si yo no molesto con mis perros, por qué un niño debe perturbar mi paseo?. Sí, soy de la inquisición jajaja.

EME: Lección número 1: si vos no te crees tu cara de mala persona no convencés a nadie. Esa es la fórmula para hacer llorar. Además hay que saber putear con la mirada.

Sofy M: Bienvenida. Pasa cuando quieras. Una venganza a tiempo para el chofer te habría hecho sentir bien, como pegarle en la cabeza con la cartera sin querer jajajaja.

Sí Rafita, soy una peleadora.

Besos gente, gracias por venir.